viernes, 28 de enero de 2011

Bajo la lluvia de Madrid

Los días de lluvia siempre tienen algo especial, como siempre será especial ese café y aquel paraguas en aquella plaza...
Hubiera deseado que nunca parara de llover. Hubiera deseado que lloviese toda la tarde...

Tenía que haber llovido más. Lo suficiente para reaccionar debajo de un paraguas y no en la boca del metro.

No paraba de llover

Palpitando el recuerdo de un momento inolvidable, tan lejano está ese mes en el cual te conocí, tan ajena es la mirada que tus ojos me cedían cuando aquella noche que volvías conmigo no paraba de llover.
Extraño tus manos entrelazadas con las mías, cuando caminábamos por las calles y el invierno nos acompañaba. Echo de menos que halagaras mis labios mientras con tus dedos recorrías su contorno.

Dejo en blanco el final de nuestra historia. Dejo en mi memoria el recuerdo de tu rostro. Conservo en lista de espera el momento para verte y mantengo presente los besos que te dí.

martes, 18 de enero de 2011

los chicos de barrio no hablan francés

Ese terrible día en el que te das cuenta de que necesitas un hombre capaz de estar a la altura de donde tú quieras estar.

Ese terrible momento en el que te das cuenta de que los chicos de barrio no hablan francés.

domingo, 2 de enero de 2011

De bruces con la subjetividad

La realidad es algo demasiado subjetivo, es simplemente algo que está en tu cabeza tal y como tú crees que las cosas han pasado. Entonces llega el día en el que alguien te confiesa que algunas cosas no son como tú las tienes en la cabeza, que la gente hablaba, que la gente tiene otra realidad en la cabeza... es entonces cuando te das de bruces con la realidad y no sabes qué subjetividad es la menos subjetiva.

Hay que aprender a vivir con segundas impresiones.